Se define la sonrisa gingival cuando que al sonreir se expone una cantidad desproporcionada de encía.
Son los medicamentos que producen un debilitamiento de la acción del músculo. Aunque su indicación principal es el atenuamiento de las arrugas de la frente, el entrecejo y las patas de gallo, también sirve para mejorar la sonrisa en casos seleccionados.
En la mayoría de ocasiones, es preferible complementar el tratamiento con ácido hialurónico, para ganar altura de bermellón (labio rojo) que tape la encía y los dientes al sonreir.
Aunque no hay un estándar absoluto de belleza
y armonía, en líneas generales consideramos que existe una sonrisa gingival cuando al sonreir se muestran más de 3 o 4 mm de encía.
Clásicamente, la aplicación de neuromodulador en los lugares seleccionados consigue una mejoría de la sonrisa gingival causada por los músculos hiperactivos elevadores del labio superior.
En cualquier caso, la percepción de lo que es estético y lo que no varía en función de cada persona.
Los relajantes musculares, más conocidos como neuromoduladores
Incluso, en muchas ocasiones podemos conseguir una reestructuración dinámica de la sonrisa gingival sólo con ácido hialurónico.